Desde hace décadas, hemos visto como la gastronomía alrededor del mundo ha evolucionado. Mezclas de sabores, de ingredientes, y culturas que se funden para representar en un platillo técnicas y procedimientos diversos capaces de evocar recuerdos.
Así como en el mundo de los cerrajeros se ha venido aplicando principios de criptografía, e inteligencia artificial capaz de reconocer patrones faciales o dactilográficos; la gastronomía ha visto el nacimiento de nuevos dispositivos capaces de mejorar el sabor de los platillos que los cocineros más experimentados han ideado.
Lo que antes pensábamos que era ciencia ficción, ahora es una realidad. La robótica y la gastronomía han logrado encontrar un punto de encuentro y te compartimos los detalles.
Moley Robotics Omicrono
Lanzado al mercado oficialmente durante el año 2021, el robot cocinero de la gente de Moley Robotics es lo que muchos habían estado esperando: “Un dispositivo equipado con 2 brazos robóticos, y manos, capaz de realizar las tareas más complicadas”.
Aunque su precio de lanzamiento es bastante elevado, trescientos mil dólares, se encuentra por debajo de sus más cercanos competidores como lo son la Thermomix o la máquina para cocinar de Lidl. Habiendo hecho su primera aparición como prototipo durante el año 2015, los fabricantes de Omicrono se han enfocado en que su producto entre al mercado lo más pronto posible, y por ende dentro de los hogares.
Omicrono fue creado con el principal objetivo de facilitar la forma tradicional en que las personas preparan los alimentos y cocinan sus recetas. Los brazos de este robot están colgando desde una unidad central similar a un torso humano, incluyendo un chasis que se desliza a través de varios rieles que se instalan en el techo de la cocina. Es importante resaltar que los aparejos y rieles son fabricados por la empresa aliada Schunk.
Las “manos” de nuestro protagonista son capaces de usar cualquier tipo de utensilio de cocina, desde ollas hasta cuchillos, horno; así como mezclar ingredientes, prepararlos, ejecutar recetas complejas con totalidad, además de limpiar al terminar.
Gracias a los rieles y aparejos que describimos anteriormente, el robot puede desplazarse por toda la cocina sin estorbar, también dispone de un conjunto de sensores, los cuales hacen un mapa virtual de la cocina para que el dispositivo reconozca el espacio donde se desenvuelve. De esta manera, el robot no solo es capaz de reconocer y adaptarse a su entorno, sino también de identificar la ubicación de los elementos necesarios para ejecutar la receta.
Como toda inteligencia artificial, para poder ejecutar sus tareas estas deben ser previamente cargadas en su sistema. Para ello el robot ha estado siendo utilizado por varios chefs alrededor del mundo para que éste adquiera la experiencia, grabando sus recetas, procedimientos. De hecho, Moley Robotics está estudiando la posibilidad de que este robot no incluya los brazos; brindando una experiencia de tener un asistente de cocina robótico, incluyendo una interfaz de pantalla táctil e interconectarse con otros dispositivos presentes en la cocina.
A veces podemos llegar a tener accidentes en la cocina, o quedarnos sin ideas para preparar alguna comida durante el día; pero sin duda que este nuevo amiguito Omicrono nos podrá solucionar la vida de muchas formas.